sábado, 6 de agosto de 2022

José Manaut: un pintor valenciano, discípulo de Sorolla, en las tierra del Eo.

 En 2017, en esos tiempos muertos que yo mismo generaba entre estudio, trabajo y demás quehaceres, como ser curioso que soy, lance una búsqueda en internet en busca de informaciones escritas sobre mi familia materna, "Os Primote".

De todos los resultados (que tampoco eran muchos) me sorprendió uno. Se trataba de los diarios de un pintor valenciano desterrado tras el final de la guerra civil a Durango y luego confinado en Madrid.

Foto Museo Manaut.


José Manaut, nace en Liria (Valencia) en 1898. Su biografía es muy amplia Destacar que estudia en la Academia de San Carlos de Valencia y en la de San Fernando en Madrid, de la que será profesor, siendo discípulo de Joaquin Sorolla. Estudia a los impresionistas en Paris gracias a una beca. Pasa a ser profesor de Instituto en Tortosa y Ronda, y una vez que estalla la Guerra Civil, tiene un papel activo en partidos é instituciones repúblicanas. Por ese motivo y por ser masón, es juzgado y condenado a pena de prisión que luego es conmutada por un destierro de  6 años en Durango (Vizcaya), que finalmente quedo en un año (1944-1945), para, finalmente, fijar su residencia en Madrid. En la capital trabajara para el Liceo frances hasta su retiro, y será a partir de 1947 que se abra una etapa muy fertil en su producción, tiempo en el que aprovecha para recorrer algunos puntos de España, y recalando en la Ría del Eo.

En su diario relata su estancia en las tierras del Eo. Describe cómo es el paso de la Ría del Eo con Pedro Justo Díaz García "Primote", y las particulares condiciones del pasaje, y lo hace en los siguientes términos:

Entre tanto evoco sensaciones. El paso de la ría con los botes que impulsa la vela cuando sopla viento propicio con la sensación maravillosa de un vuelo bajo al cobijo de la tensa lona remendada que semeja un ala de gaviota; otras veces a remo. El precio del pasaje es el de una peseta, pero con un pretexto u otro siempre hay que pagar más. Este servicio lo tiene acaparado una familia cuyo jefe “Primote”, tipo bajo, recio, algo barrigudo y ya viejo y asmático, tiene cuatro o cinco mozos dedicados a esta actividad. [3 de septiembre de 1949].

Pedro Justo Díaz García "Primote", sentado en una de sus lanchas de pasaje. Fragmento de fotografía, tomada de http://castropol.blogia.com/2006/071002-por-la-ria.-194....php


No es el único personaje castropolense que se menciona: Pedro Pardo es mencionado también, pues José Manaut, en la busqueda de localizaciones para sus obras, pinto una de ella desde Quintalonga:

1 de septiembre

En Castropol-Quinta Longa

Deambulaba por el campo en busca de temas para mis futuros paisajes, cuando acerté a pasar por un altosado coronado con un breve pero sentido grupo de pinos a cuya sombra en una plataforma con balaustrada rústica descansaba un hombre joven, tocado con un sombrero de paja de aldeano, muy gastado, alpargatas viejas, pero limpias, en mangas de camisa; estaba leyendo el “ABC.” Le abordé para que me informara donde podría dejar un lienzo que pensaba pintar. Se incorporó muy atento y quitándose el sombrero, se puso a mi disposición, indicándome un tejado de pizarra y un hórreo que sobresalía entre la fronda, díjome que aquella era su casa y que allí podía depositar el cuadro; añadió también que era muy aficionado. Estuvimos charlando un rato a la sombra acogedora de aquel rinconcito idílico, con voz tenue, con un dejo algo gallego, musical, me explicó que había estado enfermo del pecho, por cuya razón tuvo que interrumpir sus estudios de abogado; que reside allí con sus padres y hermanas ocupándose en la administración y cuidado de la hacienda familiar; que tiene o tenía su casa en el pueblo, pero que alejados por circunstancias adversas habían decidido trasladarse a esta mansión campestre donde ante solo pasaban los estíos. Esta casa solariega, amplia y algo vetusta, tiene un jardín bellísimo dentro de su relativo abandono. Grandes hortensias y multitud de flores, árboles frutales diversos cenadores umbrosos, hiedra abundante, una gran adelfa y una palmera magnífica. Un lavadero a la sombra de una lozana parra, frente al acceso a la vivienda. Esta heredad lleva el nombre enfático de Quinta Longa.

Día 3 de septiembre

El solitario de Quinta Longa

Durante trece o catorce días, instalé mi caballete en un bosquecillo de pinos, entre helechos, brezos y jaras, desde donde se divisa en el fondo de la ría, ancha de aguas tranquilas como un lago, a la izquierda la acrópolis donde se asientan las casas de Castropol y la derecha la avanzada rocosa de Figueras, presidido en primeros términos por la tierra dorada, los pinos, los maizales y los árboles y la tapia del jardín de la Quinta. Cuando había hecho su reposo, el joven hidalgo venía a charlar conmigo y a verme trabajar, con el diario en la mano. Se llama Pedro Pardo y parece de una añeja familia de la localidad con precedentes de hidalguía; es alto, algo cargado de espaldas, de complexión recia, a pesar de su enfermedad, de la que según parece está curado; el rostro algo pálido para vivir en el campo, se caracteriza por la gran frente, unos ojos pequeños en los que chispea apagadamente la ironía y un exiguo bigote sobre la boca bien formada. La guerra y la enfermedad interrumpieron sus estudios en Santiago de Compostela; terminada ésta intentó reanudarlos pero recayó y tuvo que abandonar la ciudad del Apóstol y regresar a sus lares. Cada vez más retraído, apenas sale del recinto de Quinta Longa, donde entretiene sus ocios en la lectura, escuchando la radio y conversando con los amigos que van a visitarle. Sus padres son ya ancianos, pero fuertes; y sus hermanas, creo que son tres, no son hermosas, pero tienen un aire sano y selvático.


En todo caso, quizá lo más interesante es, relativo a su obra pictórica, la relación de los trabajos que realiza en nuestra tierra, y que relaciona en su diario:

 25 de Agosto.

Actividad.

Desde que llegué ha hecho buen tiempo. Sol casi todo los días con intervalos de nubosidad, escasos. En Rivadeo he pintado dos cosas; una vista del puerto de pescadores con la entrada de la Ría, una ermita situada en un lugar llamado la Atalaya. En Castropol una vista del pueblo y la ría con el campo y un jardín en primer término (el del puerto de Rivadeo y el de Castropol de 1m x 1m) además un paisaje bucólico con unos verdes maravillosos bastante grande también, dos vistas de Ría, de tamaño más reducido. Jornadas agotadoras no sólo por tener que permanecer de pie y al sol casi siempre ocho horas o más sino por los kilómetros a recorrer para ir a los lugares de trabajo. Todo lo he resistido magníficamente, y mi salud es excelente.


Bien. En la actualidad, el Museo Manaut tiene una página en la que se puede disfrutar de parte del catalogo pictórico de este artista. Y en un tranquilo paseo por esta galeria virtual, no me quedo más que detenerme en un "Paisaje Costero", fechado en 1949, y con número de inventario 404, que no me costo identificar como una vista de Castropol desde Quintalonga con la Ría del Eo al fondo, y de las dimensiones que el autor cita en su diario. Lamentablemente, no logre identificar, dentro de ese catálogo, el resto de las obras que menciona. Pero es un ejemplo más de la atracción que Castropol y el paisaje de la Ría del Eo ejerce sobre los artistas.

Vista de Castropol desde Quintalonga, con la Ría del Eo al fondo. 1949. Autor: José Manaut.  http://www.josemanaut.com/paisajesoleos.html

Eso si, también realiza una crítica furibunda a los edificios y arte locales, así como de algún personaje local. 


Bibliografía y webgrafía:

Museo Manaut. http://www.josemanaut.com/index.html

Castropol.blogia.com

Los diarios de José Manaut. Universidad Carlos III: Biblioteca. https://www.uc3m.es/biblioteca/colecciones/jose-manaut/diarios


 

miércoles, 14 de abril de 2021

Castropol y la proclamación de la II Republica

 Cercanos ya a la fecha en que se celebra el 90º Aniversario de la proclamación de la II República en España, creo que es un buen momento para averiguar cómo se vivió ese momento en la villa y concejo de Castropol.

Antecedentes

La República como forma de gobierno era considerada, desde la Revolución Francesa, como la más democrática. Es cierto que los liberales consintieron monarquías constitucionales. Pero también es cierto que lo hicieron porque habían logrado sus objetivos, los de la burguesía, que en el Antiguo Régimen detentaba el poder económico, y con la Revolución Francesa logro alcanzar el poder político, que le estaba vetado anteriormente. Esos liberales no buscaban, por tanto, otra cosa que equipararse a los Estamentos privilegiados. El resto de grupos sociales eran menospreciados.

El liberalismo político fue evolucionando, añadiendo elementos a su cuerpo doctrinario, como el nacionalismo, y disgregándose en diversas opciones políticas. Y en la Historia de la España decimonónica tenemos claros ejemplos: Partido Moderado, Partido Progresista, Unión Liberal, Demócratas,... Los partidos republicanos eran también liberales, pero, además de ser partidarios de un sufragio universal y la consecuente soberanía popular que llevaba aparejada, así como un catalago de derechos y libertades más amplio que el defendido por otras opciones políticas liberales, eran también partidarios de otra forma de Estado: la República.



La mal hadada I República vino obligada por las circunstancias, pero sin convencimiento: la abdicación de Amadeo I de Saboya y la negativa a la vuelta de los Borbones, junto con una "neutralidad" interesada de los partidarios en las Cortes de estos últimos, facilitaron su llegada, en una situación extremadamente compleja para su supervivencia.



De hecho, su vida fue muy corta. Canovas del Castillo, antaño miembro del cajón desastre ideológico que era la Unión Liberal y ahora Conservador, trae de vuelta a la dinastia de los Borbones, en la figura de Alfonso XII. Entre los objetivos de este político, se encontraba la creación de una monarquía constitucional que reprodujera el sistema político británico en el que dos partidos se alternasen en el poder, permitiendo, de este modo, otorgar al pais estabilidad política, económica y social. La Constitución de 1876 es la más longeva tras las de 1978...al menos en la teoría. Consagraba un régimen teóricamente democrático. Pero la realidad era muy otra: consolidaba un régimen oligarquico.

La manipulación electoral desde Gobernación y a traves de los caciques locales, otorgaba el poder a Conservadores o Liberales según se hubiese pactado. Es el pucherazo y el caciquismo que los Regenacionistas, como Joquin Costa, denunciaban como uno de los males que aquejaban al país en los dias postreros del siglo XIX. Males que, como si se hubiese abierto la Caja de Pandora, salieron todos a relucir tras la Guerra del 98, que supuso la derrota y la perdida para España de su imperio ultramarino y la categoría de potencia internacional.


En medio de esta crisis del régimen de la Restauración, sube al trono Alfonso XIII, luego de la regencia de su madre, la reina Maria Cristina. La pérdida de las colonias hizo mirar hacia África. España tratara de imponer un protectorado en la parte de Marruecos que Francia le deja, y lo hara con muchas dificultades. Esos primeros 20 años del siglo XX seran extremadamente complejos. La Gran Guerra, en la que España se declaro neutral, no dejo indiferente a la sociedad, que se dividio entre partidarios de unos y de otros en dicha contienda. Lo cierto es que el país se "beneficio" de su neutralidad. Las reservas de oro aumentaban en la misma medida en que una gran parte de la población no podia alimentarse en condiciones. Ante una situación semejante, no extraña que la mal llamada "gripe española" tuviese tan elevada mortalidad en el país. Las condiciones laborales tampoco mejoraron, y en terminos relativos empeoraron (mantenimiento de salarios y aumento de los precios). Todo ello llevo a una fuerte inestabilidad laboral y fuerte presencia del movimiento obrero, animado también por los sucesos de Octubre de 1917 en Rusia.

La paz que en Europa se habia alcanzado parecia que no iba con nosotros, centrados en el "problema de Marruecos". El general Silvestre, en connivencia con el monarca, inicia una operación en el Rif que se salda con la perdida de 10000 hombres y material de guerra, de todas las posiciones españolas en el Norte de Marruecos y casi de las ciudades de Ceuta y Melilla: es el desastre de Annual. De hecho dio lugar a que se estableciese una efimera República del Rif.


La cuestión es que se ordeno una investigación sobre dicho desastre militar: el informe Picasso no llego a ver la luz en el Congreso de los Diputados: apuntaba a la corona como responsable. Ante esta situación, Miguel Primo de Rivera, con la aquiescencia de Alfonso XIII, impuso una dictadura, primero con un diretorio militar y luego con un directorio civil.

Cuando definitivamente Primo de Rivera se retira, el 28 de enero de 1930, Alfonso XIII va a buscar la manera de reconducir la situación atendiendo, cómo no, a sus propios intereses. Buscara la manera de hacer "tabula rassa" con el periodo de la dictadura, y volver al inoperante régimen político anterior. Pero a esas alturas, sus apoyos eran prácticamente inexistentes.



Hundimiento de la monarquía

Como he indicado en lineas precedentes, los apoyos políticos de Alfonso XIII habían quedado hipotecados con su apoyo a la dictadura, y hasta los monarquicos se mostraban abiertamente contrarios al monarca.

Así las cosas, el 17 de agosto de 1930 se firma el conocido como "Pacto de San Sebastián", en el que los partidos que se oponen a la monarquía definiran las actuaciones a seguir para lograr el advenimiento de un nuevo régimen republicano. Siguiendo la tradición política del país, sale elegido un comite revolucionario que buscara un pronunciamiento militar apoyado por la creación se juntas civiles. Los socialistas se suman en octubre.

Banquete ofrecido por el Gobierno a los participantes en el "Pacto de San Sebastián". De izq. a dcha: (sentados): Santiago Casares Quiroga, Marcelino Domingo Sanjuán, Alejandro Lerroux, Alcalá Zamora, Manuel Azaña, Fernando de los Rios y Jaume Aiguader; (de pie): Carrasco i Formiguera, Eduardo Ortega y Gasset, Luis Nicolau d'Olwer, Rafael Sánchez Guerra, Álvaro de Albornoz, Fernando Sasiáin, Angel Galarza, Diego Martinez Barrio y Matías Mallol Bosch. Madrid, 22 de agosto de 1931. Fuente: https://www.eldiario.es/politica/nuevo-pacto-san-sebastian-tumbar-mariano-rajoy_1_2097553.html


Dicho levantamiento estaba previsto para el 16 de diciembre, pero el 12 el capitan Fermín Galan proclama la República en la guarnición de Jaca y se dirige a Huesca con una columna. Es derrotado. Se le forma consejo de guerra y es condenado a muerte junto al capitan García Hernández y ejecutada la sentencia el mismo dia 14, dómingo.

Con todo, el 15 de diciembre Queipo de Llano junto a los comandantes Ramon Franco e Ignacio Hidalgo se apoderan del aerodromo de Cuatro Vientos (Madrid). Pero faltos de apoyo, por la indecisión socialista, fracasan y hullen a Portugal.

Fracasado el pronunciamiento, el gobierno de Berenguer pretendía convocar elecciones legislativas para enero de 1931, siendo la respuesta de los partidos el anuncio de que no concurriran a esas elecciones.

Berenguer dimite en febrero, y Alfonso XIII encarga nuevo gobierno al almirante Aznar. Aznar decide  convocar, en primer lugar, elecciones municipales, seguidas de unas generales, con caracter constituyente. 


El 12 de Abril

La fecha de las elecciones municipales sera el 12 de Abril.

Los firmantes del "Pacto de San Sebastián" concentraron sus esfuerzos en convertir las municipales del dia 12 en un plebiscito entre Monarquía o República.

Julian Casanova y Carlos Gil Andres escriben sobre ese momento:

"Así fue. Los monárquicos pensaron hasta el último momento que lo iban a ganar, confiados en el manejo de la maquinaria gubernamental. Por eso mostraron su "consternación" y "sorpresa" cuando muy pronto supieron que los repúblicanos habían vencido en la mayoría de las capitales de provincias, en 41 de 50. Sólo Juan de la Cierva propuso recurrir a las armas para evitar la quiebra de la Monarquía. Pero los demás ministros, encabezados por Romanones, reconocieron la derrota. Aznar dimitió la noche del 13. Al día siguiente, muchos municipios proclamaron la República. Alcalá Zamora, presidente del Comité revolucionario, exigió al Rey que abandonara el país." (pág 113)


¿Y qué sucede en Castropol?

La villa y el concejo no son ajenos a estos acontecimientos. El Aldeano, creado por los fundadores de la Biblioteca Popular Circulante de Castropol en 1929, nos relata cómo se  vivio tan trascendental momento.

El Aldeano tenia una periodicidad quincenal. El 15 de abril sale el primer numero del mes, pero como se indica en la primera página, en el momento en que el periodico esta en imprenta, todavía se estaba votando. En el número, al respecto de las cuestiones políticas, aparecen algunas cuestiones interesantes: en un caso, en la sección "Faraguyas" desde el periódico se niegan a facilitar el nombre de uno de sus articulistas que firma como "repúblicano", alegando que "no les importa" y que ya no temen represalias. Eso nos da indicio de que el grado de libertad de expresión estaba limitado por la pedrada que te podian dar en una caleya un poco oscura. En esa misma página se informa de los resultados o evolució de una suscripcción popular para las familias de Galan y García y para los presos y expatriados del levantamiento fracasado de diciembre de 1930.





Ahora bien, sera el ejemplar siguiente, con fecha del 30 de abril el que describe con mucho más detalle los acontecimientos que se sucedieron una vez se comunico la proclamación de la República en Madrid.
Como apunta El Aldeano, las primeras noticias sobre los resultados se conocen telefonicamente a la noche del dia 12. A mediodia del 14, El Correo Gallego informaba con mayor precisión, y a las 6 de la tarde la noticia era confirmada telegrafica y telefónicamente.
Por lo que se reláta hubo de inmprovisarse una bandera tricolor, en medio de celebraciones y algarabia, que fue concentrando ese dia y el siguiente a gente de todo el concejo. En todo caso, la lectura del ejemplar trasmite mucho mejor los sentimientos de esperanza que se abrieron en los castropolenses ante el inicio de tan excitante etapa histórica. Como último apunte, en este mismo ejemplar ya se abre el debate sobre el encaje de Asturias en la futura reorganización de Estado: empieza a plantearse la posibilidad de un Estatuto de Autonomia.
Os dejo a continuación imágenes del ejemplar en un buen formato, para su lectura:





Bibliografia:

Carr, Raymond: España 1808-2008. Ariel, 2009

Casanova, Julian y Gil Andres, Carlos: Historia de España en el siglo XX. Ariel, 2010

Paredes, Javier (coord.): Historia contemporánea de España (siglo XX). Ariel, 1998

https://bibliotecavirtual.asturias.es/i18n/publicaciones/numeros_por_mes.cmd?idPublicacion=24854&anyo=1931



lunes, 2 de marzo de 2020

Clara de Rueda, a Bruxa d'As Campas.



Hace ya tiempo, cuando estaba preparando un trabajo para una de las asignaturas de la carrera sobre las fiestas de invierno en Castropol, me pase unos cuantos días leyendo, sistemáticamente, el decenario Castropol, que encuadernado en varios volúmenes, guarda la biblioteca del RIDEA.

Decenario Castropol, 30 de Abril de 1917.
En el encontré muchas sorpresas. Y una de ellas fue la mención a una bruxa n'As Campas (Piñeira, Castropol).

José Díaz Fernández.png
José Díaz Fernández, hacia 1931. Fuente: Wikipedia.
El artículo venia firmado por José Díaz Fernández, más conocido en Castropol como Pepillo El Preferente, que aunque nacido en Aldea del Obispo (Salamanca), era de Castropol como lo eran sus padres.
Independientemente de sus orígenes, José Díaz Fernández fue miembro de la otra generación del 27, periodista (redactor del periódico asturiano El Noroeste y del madrileño El Sol), escritor y político (miembro del partido Alianza Republicana, fue diputado a cortes constituyentes en 1931).
El texto, que se puede leer en la imagen que ilustra esta entrada, deja bien a las claras que se presenta a esta mujer como algo "pintoresco", no solo tradicional, sino trasnochado, fruto de la ignorancia y la superstición que, en aquel entonces, y hoy en día (aunque bajo otras formas) se mantiene.
Era una mujer que atraía a gentes que venían casi en peregrinación desde distintos lugares, en su mayoría de Galicia. Y dio lugar algunas historias más, como la que me relataba Miguel Angel Serrano Monteavaro, otro ávido erudito castropolense, donde Clara de Rueda, ante las burlas del personaje, presagiaba un fin violento para Julio Valea, "El Gallego Julio" que moriría tiroteado en Buenos Aires el 16 de febrero de 1930, y que  Arturo Álvarez Fernández "Tanguerio" recupero en su novela en eonaviego "Vida Maleva".
Pocos meses después de la visita de José Díaz Fernandez, Clara de Rueda fallece en el Polvorín de As Campas a la edad de 87 años.

Copia de la partida de defunción de Clara de Rueda, proporcionada por Egidio García Fernández (
†)


Bibliografía:
Álvarez Fernández, Arturo: Vida Maleva. Xixón: Suburbia Ediciones, 2013
Entrevista a Arturo Álvarez Fernández "Tangueiro":  https://www.youtube.com/watch?v=wnUcjyxVciQ
Decenario Castropol. Disponible online en: http://hemeroteca.gijon.es/

martes, 6 de agosto de 2019

Noticias recientes sobre la intervención arqueológica de As Huertas

Sobre la intervención arqueologica en As Huertas (Castropol), clicando en el texto en rojo, se enlaza el pequeño reportaje emitido por RTPA.
En todo caso algunas precisiones. Esta es la cuarta intervención. Por tanto, no llevan unas semanas, sino que es un tema en vigor desde 2015.





jueves, 9 de mayo de 2019

Rectificación del Censo electoral de 1912 del Concejo de Castropol.

La mayor parte de las veces los tesoros no son de oro, ni tan siquiera tienen el mismo valor para una persona que para la que tiene al lado. Y eso es lo que hoy traigo a esta nueva entrada en el blog, un tesoro...por lo menos para el que estas lineas escribe.
Sin lugar a dudas la red, Internet, ha facilitado la busqueda de información, recursos y documentos de lo más variopinto... y eso  facilita mucho las cosas a cualquier historiador.
Hoy lo que voy a presentar es un conjunto de 6 pliegos, que en la forma presentada tienen unas medidas de 33x 24 cm. En ellos se aporta una rectificación del Censo electoral del Concejo de Castropol en 1912,  para la elecciones que se realizaban durante el régimen de la Restauración.
Un analisis y comentario de los documentos y una explicación sobre que fue el régimen de la Restauración, lo dejare para otro post, ya que todavia estoy trabajando en ello.

1. Descripción de los documentos.

El encabezamiento no deja lugar a dudas de que se trata, y por tanto no vamos a detenernos mucho en ello.
En las lineas siguientes se localiza la provincia, término municipal, distritos y secciones. Bueno...pues Provincia de Oviedo... Término municipal de Castropol. Del conjunto de pliegos conservados (lo que no quiere decir que esten todos), se deduce que el Concejo, a efectos electorales, estaba dividido en tres distritos: Castropol, Barres y Vega de los Molinos. Estos a su vez se encontraban subdivididos en distintas secciones.

Distrito municipal núm.1: Castropol                           Sección num. 1: Castropol
                                                                                  Sección num. 2: Figueras
Distrito municipal núm. 2: Barres                               Sección num. 1: Barres
                                                                                  Sección num. 2: Tol
Distrito municipal núm. 3: Vega de los Molinos         Sección num. 1: Vega de los Molinos
                                                                                  Sección num. 2: ¿?
                                                                                  Sección num. 3: Vilavedelle

En estos listados se consignan, en columnas sucesivas, el número de orden en la Sección, los apellidos y el nombre del elector, su edad en el momento de la confección de la lista, su domicilio, la profesión que ejerce y si sabe escribir o no.


A continuación muestro el escaneado de estos pliegos.


Distrito municipal núm. 1: Castropol. Sección núm. 1. Castropol








Distrito municipal núm. 1: Castropol. Sección núm. 2. Figueras







Distrito municipal núm. 2: Barres. Sección num. 1: Barres







Distrito municipal núm. 2: Barres. Sección num. 2: Tol.





Distrito municipal núm. 3: Vega de los Molinos. Sección num. 1: Vega de los Molinos.









Distrito municipal núm. 3: Vega de los Molinos. Sección num. 3: Vilavedelle.







viernes, 16 de diciembre de 2016

Os Caleiros

Las leyes de Patrimonio Histórico y Cultural, promulgadas a nivel estatal (16/1985) y autonómico (1/2001 del Principado de Asturias), contemplan la protección de distintos tipos de bienes, muebles e inmuebles, materiales e inmateriales. Entre ellos se encuentra el patrimonio industrial y el etnográfico, lo que en arqueología, se ha llamado arqueología industrial.
En muchas ocasiones ese patrimonio pasa desapercibido, o directamente es despreciado, y no se le da la debida importancia desde un punto de vista histórico, y menos aun se ven en el otro tipo de potencialidades.


Hoy me voy a centrar en unos elementos, que no por estar bien presentes en el Concejo de Castropol son mejor conocidos: Os Caleiros.
Dare alguna pincelada, pero existen en nuestra comarca publicaciones relativamente recientes sobre este patrimonio, así como un inventario de los mismos de la Consejería (aunque extrañamente parcial), y noticias recientes de concejos vecinos que van a poner en valor os caleiros que poseen. En todo caso, esas referencias las podréis leer al final de este post, en el apartado de bibliografía.
¿Qué son Os Caleiros? La respuesta más sencilla es que son hornos de cal. Supongo que eso a muchos lectores no les aporta mucha información. Los hornos de cal, Os Caleiros, son estructuras de forma troncocónica, de dimensiones variables, construidos en mampostería refractaria unida con argamasa. En la base de esta estructura se abre un vano por el que se atizaba el horno una vez que estaba armado, es decir, rellenado de piedra caliza, edificando con ella una bóveda interior desde la base hasta sobresalir por el borde superior del horno. El hueco formado por esa bóveda era el lugar en el que se depositaba el material combustible (generalmente toxo). Una vez encendido, el calor producía una calcinación de la piedra caliza, una transformación química que la convertía en cal viva (Méndez Pérez de Presno y Lombardero Rico: 2006, págs.34-37).
El empleo de la cal esta constatado desde el Neolítico, pero sera a partir de la Antigüedad cuando veamos un uso más diversificado. No solo era empleada como material de construcción (bien como mortero y argamasa o como elemento decorativo), sino también en industrias tintoreras, en la  purificación de aguas, como abono, etc. La cal viva tiene, además un poder caustico, lo que permite que sea aprovechada como  desinfectante en lugares contaminados, para acelerar la corrosión o en el curtido de pieles. La industria química la ha empleado para la fabricación de crisoles resistentes a temperaturas elevadas, como fundente en operaciones metalúrgicas, en la deshidratación de líquidos, obtención de glucosa. Sin olvidarnos de sus usos medicinales: mata los bacilus del tifus y el cólera, impide la putrefacción de líquidos en cultivo, en diversos preparados contra diversas enfermedades de la garganta y de la piel. Evidentemente, muchos de estos usos han decaído, por la competencia de otros productos (Martínez Rossy et alii: 1986, págs 14-15).
Hasta este momento hemos visto qué son, cómo funcionan y que usos tiene el producto que se extrae de estos hornos. Ahora bien: ¿cual es el registro material que tenemos? Hoy en día, estos hornos han sido completamente abandonados, muchos de ellos en un estado ruinoso y que, salvo actuación pública de rescate, desapareceran en un corto espacio de tiempo.


Situación de los caleiros de los concejos de Castropol, Vegadeo y Taramundi. Mendez Perez de Presno y Lombardero Rico, 2005. Pág. 23.


En el concejo de Castropol han existido 49 caleiros, parte de los cuales han sido debidamente inventariados por el servicio de Patrimonio de la Consejería de Cultura del Principado de Asturias.
En este caso solo vamos a mostrar parte de los que no han entrado dentro de ese inventario, muy próximos a la villa.
Y para comenzar, vamos a iniciar nuestra ruta por el que probablemente este en mejores condiciones, de todos los que vamos hacer mención. Y  sí, la fotografía de El Turrullon de Salias no esta al comienzo del post por ser un lugar bonito. Lo es porque tiene un buen ejemplo de este tipo de estructuras. Seguramente más de uno ha subido a ese islote aprovechando la bajamar. Lo que ya no estoy tan seguro es que se fijase por dónde lo hacia.

Vísta de El Turrullon (Salías), desde el Oeste. Se puede apreciar hacia el centro de la imagen, como hay una vaguada, marcada por la sombra. Foto 2016.

Misma vista que la anterior, aunque la fotografía fue sacada en 2007.

En la imagen anterior se puede observar, hacia el centro de la imagen,una vía de acceso al islote. Una de las primeras cosas que puede llamarnos la atención es una hondonada en la roca, con unos tonos rojizos y negruzcos, que bien pudieran anunciar que aquel lugar estuvo sometido a altas temperaturas, probablemente producidas por una hoguera de buenas dimensiones. Es muy posible que pudiera tratarse de las salinas que, por un lado, mencionan las fuentes medievales y, por otro, denota la propia toponímia ("Salías") (Lombardero Rico et alii.: 2017, pág. 28)


Una vez pasada esta pequeña hondonada, nos encontramos con el acceso más sencillo al Turrullon. Una vaguada aparentemente natural nos permite acceder a la parte superior del Turrullon. Aunque en cuanto nos acercamos, pronto nos damos cuenta de que tiene poco de natural y mucho de antropica.

Caleiro 1. Paso para acceder al Turrullon, aprovechando la ruina del caleiro. En la izquierda del jalón, unos centímetros sobre el, se pueden observar restos de un muro de mamposteria. Foto 2016.

Pronto nos encontramos con un muro de mampostería cubierto por vegetación, que impide ver la verdadera dimensión de horno. Las paredes conservadas se encuentran recubiertas de una capa blanca: de cal.

Caleiro 1. Alcanzada la base del caleiro, nos encontramos de frente con los restos del muro que lo conformaba. Foto 2016.
Caleiro 1. Una imagen del mismo muro, en una fotografía de 2007.

A pesar de la vegetación, el diámetro del horno se hace evidente (unos 3,30 m.), y la altura se intuye (cerca de 3 m.), tendiendo los muros a disminuir su diametro a medida que ascienden.
¿Por qué nos encontramos un caleiro en este lugar? Por el mismo motivo que se encuentra el resto de los existentes en el concejo de Castropol. La caliza se encuentra con facilidad en toda la vertiente asturiana del Eo: son conocidas en los mapas geológicos, como Calizas de Vegadeo. El combustible empleado es leñoso: frecuentemente toxo, pero sin despreciar otras maderas llegado el caso. Y en la costa, por la facilidad de su transporte a los distinto núcleos urbanos situados en la riberas de la Ria del Eo.
Como digo no es el único ejemplo de un horno de cal en esta zona de la ensenada da Lieira. Recorriendo la playa entre El Turrullon y A Fonte da Vila, vemos como estas construcciones salpican la linea de costa. En algunos casos, como en las dos fotos que siguen, solo podemos decir que se trata de muros pertenecientes algún tipo de construcción de función indeterminada, que ni la vegetación ni el tiempo nos ha permitido profundizar.

Primero de los muros de mampostería que nos encontramos a lo largo de la playa, en dirección a Castropol. Foto 2016.

Segundo de los muros de mapostería al pie de la playa, en dirección a Castropol. Foto 2016.

Pero no encontramos con esto. Se trata de lo que queda del muro de mapostería de otro caleiro, con el característico color blanco dejado por la cal. El diámetro de este horno, en función, ya no solo de los muros conservados, sino de la costra de cal que se observa en el suelo, seria aproximadamente de 3,5 m., y el muro alcanza los 2,3 m. No nos debe extrañar que solo se conserve la mitad de este horno, ya que el trabajo de las aguas de la Ria ha propiciado su ruina y a dejado al descubierto los muros, que se apoyaban directamente sobre la ladera, permitiéndonos observar un característico color rojizo en la maposeria, indicativo de que este muro ha estado expuesto a altas temperaturas.

Caleiro 2. Vista del muro que se conserva. Foto 2016.


Caleiro 2. Extensión de la costra de cal, que nos informa de como las dimensiónes de esta estructura eran mayores. Foto 2016

Caleiro 2. Otra vista del mismo punto anterior, pero en alzado, en que se observa un zócalo de mamposteria, enrojecido y ennegrecido por la acción del calor. Foto 2016.


Además de los dos caleiros mencionados, en una visita anterior pude constatar la existencia de otros tres hornos, con la particularidad de que en uno de ellos se superponian dos. Esta situación debe responder algún hecho excepcional: la ruina del primero de los hornos de cal no debio hacer viable su reconstrucción y obligo a la construcción de uno nuevo en el mismo lugar.

Caleiros 3 y 4. En este caso da la sensación de que tenemos un 2x1. Como se observa en la fotografía de 2007, hay dos muros consecutivos concentricos, que con toda probabilidad correspondieron a dos caleiros. El primero debió de sufrir algún desperfecto importante que obligo a la construcción de uno completamente nuevo.

Caleiro 5. La fotografía fue sacada en 2007.

En todo caso, la situación de los cinco hornos identificados, es de ruina, amenazados los pocos restos que se conservan por la vegetación y la acción marina.
Como patrimonio industrial y etnográfico tienen un gran valor para la comprensión de las actividades económicas y sociales, no solo de Castropol, sino de los concejos vecinos, y de estos con areas geográficas más lejanas.
Igual que el vecino concejo de Vegadeo pretende hacer con un patrimonio similar, si bien en mejor estado, convendría que las autoridades municipales del Concejo de Castropol junto con las de la Consejería de Cultura del Principado de Asturias, procediesen a poner en manos públicas estos hornos, consolidasen los mismos, y los pusieran en valor, aprovechando, por ejemplo, el paso de la senda costera que une las villas de Castropol y de As Figueiras, proporcionando un aliciente más a los ya existentes (tanto patrimoniales como paisajisticos).

BIBLIOGRAFÍA:

Lombardero Rico, Chemi, Méndez Pérez de Presno, Marcelino y Pardo Pérez-Sanjulián, Juan José: Los curtidos y la fabricación de calzado en el occidente asturiano. Vegadeo: Amigos de Vegadeo, 2017.
Méndez Pérez de Presno, Marcelino y Lombardero Rico, Chemi: Los hornos de cal en el extremo occidental asturiano. Oviedo: CEDER Oscos-Eo, 2006.
Martínez Rossy, Isabel et alii.: Caleros y Canteros. Salamanca: Diputación, 1986.